Una sentencia del Tribunal Supremo de Alabama según la cual los embriones congelados se consideran niños provocó que el mayor hospital del estado suspendiera los servicios de fecundación in vitro.
El caso tiene su origen en una demanda por homicidio culposo interpuesta por tres parejas cuyos embriones fueron destruidos en una clínica de fertilidad en 2020.
"Incluso antes de nacer, todos los seres humanos tienen la imagen de Dios, y sus vidas no pueden ser destruidas sin borrar su gloria", dijo el presidente del Tribunal Supremo, Tom Parker, tras el caso.
El Sistema de Salud de la Universidad de Alabama en Birmingham detuvo el procedimiento por temor a que se le pudiera considerar responsable si se destruía un embrión.
El hospital dijo que seguiría extrayendo óvulos de los ovarios, pero que no los fecundaría con esperma, que es el siguiente paso del proceso.
"Nos entristece que esto afecte a los intentos de nuestras pacientes de tener un bebé. Pero debemos evaluar la posibilidad de que nuestros pacientes y médicos puedan ser procesados penalmente o enfrentarse a daños punitivos por seguir el estándar de atención para los tratamientos de FIV", según un comunicado del Sistema de Salud de la Universidad de Alabama en Birmingham.
Además, diferentes médicos advierten de las consecuencias negativas para los tratamientos de fertilidad en Alabama debido a la sentencia.
"No todos los embriones se utilizan, ni pueden utilizarse. Promulgar una legislación que conceda personalidad jurídica a los embriones podría tener consecuencias desastrosas para el uso de la fecundación in vitro, una ciencia en la que muchas personas confían para construir sus familias", declaró a la BBC Elisabeth Smith, del Centro de Derechos Reproductivos.
Por su parte, la Asociación Médica del Estado de Alabama reconoció "la importancia" de la decisión sobre la identidad de los embriones.
"Esta decisión afecta a todos los habitantes de Alabama y probablemente conducirá a un menor número de bebés, niños, nietos, sobrinas, sobrinos y primos, ya que las opciones de fertilidad se limitan para aquellos que quieren tener una familia", dijo la Asociación Médica del Estado de Alabama.
La política republicana Nikki Haley respaldó el fallo: "Un embrión, para mí, es vida y por eso entiendo de dónde viene".