El caso le estalla al Gobierno Sánchez en un momento francamente delicado.
Después de los reveses sufridos con la ley de la amnistía, con una nueva prórroga concedida por el Congreso para intentar convencer a Carles Puigdemont que dé su plácet, y con el resultado de las elecciones en Galicia, ahora llega el varapalo del asesor de José Luis Ábalos.
Koldo García se encuentra ahora mismo detenido por estar supuestamente implicado en el cobro de comisiones por la compra de mascarillas en el momento más crudo de la pandemia por coronavirus.
Vicente Vallés, en su informativo del 21 de febrero de 2024, explicó con detalle quién era la persona de confianza del entonces ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE:
Es muy probable que el nombre de Koldo García no les diga gran cosa, pero sí es un nombre que durante algún tiempo ha ido de boca en boca en círculos políticos y periodísticos. Koldo García ha sido uno de esos personajes satélites que orbitan alrededor de pesos pesados de la política. Durante unos años fue el hombre de confianza de un dirigente político muy importante y muy poderoso, el exministro de Pedro Sánchez y exsecretario de Organización del PSOE José Luis Ábalos.
En los tiempos de máxima visibilidad política de Ábalos, Koldo García era la sombra que siempre aparecía a su lado. El pasado de Koldo García aportaba, entre otros, el dato de que fue portero de un prostíbulo. Después se convirtió en el hombre de confianza de Ábalos incluso en labores muy discretas. Ahora se inicia la investigación sobre el hombre de confianza del exministro Ábalos a quien se acusa de participar en una trama corrupta con mascarillas durante la pandemia cuando estaba en pleno ejercicio de su labor como asesor. La unidad central operativa de la Guardia Civil, la UCO, ha detenido a unas 20 personas y ha realizado al menos 23 registros.
El director de Antena 3 Noticias subrayó que la noticia incomoda, y mucho, tanto al Ejecutivo de Pedro Sánchez como a Ferraz, sede del PSOE:
El asunto resulta extraordinariamente incómodo tanto al Gobierno como al PSOE porque Ábalos ya no es ministro pero sigue siendo diputado y es el guardián de delicadas confidencias políticas acumuladas durante mucho tiempo. Koldo García también conoce unas cuantas. Hoy Ábalos dice que está estupefacto por la detención de su antiguo colaborador.
