La pareja de inquilinos llegó desde Formosa con su hija de 8 años, alquilaron un departamento y comenzaron a trabajar para ganarse la vida.
Durante los festejos de fin de año, volvieron a su provincia. En su ausencia, la propietaria les comunicó que ya no podían usar la propiedad.
"Vinimos de urgencia porque la administradora del lugar nos dijo que no podíamos ingresar, pero tampoco nos permitió sacar las cosas. Nos quedaron nuestras cosas, herramientas de trabajo, tenemos un emprendimiento de sahumerios. Todo quedó adentro, está estimado en dos millones de pesos", relató Enzo, la víctima del caso.