El 13 de Marzo de 1989 en todo Quevec, Canadá, la luz se fue repentinamente dejando a 6 millones de personas sin electricidad. La culpable fue una supertormenta solar, una fuerte explosión en la superficie del sol, siendo además una de las supertormentas más fuertes de las que se tiene registro pero los científicos saben que esta supertormenta no está ni mucho menos cerca de lo que nos podría suceder si una supertormenta solar realmente potente llegara a nuestro planeta. Las consecuencias de una supertormenta solar a escala planetaría serían mucho peores de lo que nos podríamos imaginar.