El 23 de febrero de 2008, un bombardero furtivo de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos llamado Spirit of Kansas entró en pérdida y se estrelló en la pista momentos después del despegue de la Base de la Fuerza Aérea Andersen en Guam. Ambos miembros de la tripulación sobreviven después de expulsarse con éxito de la aeronave.