Un hombre de 39 años recibió una puñalada certera en el cuello después de que fuera a casa de un vecino a reclamar por los desrozos que le había ocacionado a su automóvil particular y falleció de manera casi inmediata.
Familiares y amigos de la víctima se acercaron al domicilio del asesino y, en un intento de llevar a adelante justicia por mano propia, le destrozaron la vivienda para posteriormente prenderla fuego.
Un equipo de Crónica HD se acercó al lugar para conocer todos los detalles.