Juliana, quien no tardó en posicionarse como la participante más polémica del realitý que se emite por la pantalla de Telefe, fue salvada por el público el domingo pasado y arremetió contra todos sus compañeros.
Uno de los enfrentamientos fue mal visto desde la producción que decidió suspender el envío en vivo y llamarles la atención a las contrincantes.