Alon Ohel es uno de los 136 rehenes que quedan en manos de Hamás cuando se cumplen 60 días del inicio de la guerra. Los familiares siguen presionando para que se negocie y se vuelva a un alto el fuego. Su madre, Idit, es de nacionalidad serbia y sueña con tener a su hijo pianista de vuelta a casa. En la plaza donde se reúnen los familiares de los secuestrados en Tel Aviv (Israel), ella ha instalado un piano en homenaje a su hijo.