En 2022, más de 545.000 neoyorquinos abandonaron el estado, buscando un nuevo hogar en lugares como Florida, Texas, Nueva Jersey, Connecticut y Pensilvania.
Florida fue el destino de la mayoría de los neoyorquinos en 2022, ya que 91.000 emigrararon a este estado.
Según los datos del Censo de EE.UU., Nueva York experimentó una pérdida neta de población de 244.000 residentes.
Y ello a pesar de que en 2022 se mudaron a Nueva York más personas que en la última década, con 301.000 nuevos residentes.
A pesar de este éxodo masivo, los costes de la vivienda en Nueva York no han dejado de subir.
En Manhattan, el aquiler cuesta de media 4.350 dólares, mientras que en Brooklyn 3.700 y 3.528 dólares en Queens.
Los datos muestran que esta tendencia se ha mantenido desde 2012, con una emigración de la población que superan significativamente la llegada de nuevos habitantes.