A Luis David García los médicos le diagnosticaron retraso psicomotor, una manifestación clínica que afecta el desarrollo de las destrezas cognitivas y motoras. Se lo detectaron tres días después de haber nacido en la Maternidad de Los Mina.
Hoy tiene 21 años y, desde que nació ha vivido postrado a una cama. Le es imposible hablar y sólo emite algunos gritos. Ocasionalmente muestra una sutil sonrisa, con la lengua semiafuera. Esa es su forma de comunicarse. Así le deja saber a quienes están a su alrededor que se encuentra bien, y lo hace mientras mueve su cuerpo de un lado a otro.