La fiscalía de Guatemala allanó el martes las instalaciones donde se resguardan las papeletas de las elecciones generales del pasado 25 de junio ante una denuncia de supuestas anomalías en el recuento de los votos, lo que provocó que el presidente electo, Bernardo Arévalo, exigiera la renuncia de la fiscal general Consuelo Porras, un fiscal y un juez.