Los productores de Parmigiano-Reggiano están pensando en incorporar microchips en sus ruedas de queso de 40 kilos para combatir las falsificaciones. Se dice que estos nuevos microchips, del tamaño de un grano de arena, serán seguros para el consumo y se colocarán en una etiqueta de seguridad alimentaria. El Parmigiano-Reggiano, solo se puede producir en una zona del norte de Italia, ya que es el auténtico queso parmesano y está protegido por la Unión Europea.Este queso es más caro que los otros tipos o variedad de parmesano. Los microchips serán de silicona y se podrán escanear para mostrar el número de serie que confirmará su autenticidad. Estos microchips no pueden ser escaneados a distancia y no tienen la capacidad de rastrear a alguien que los ingiera por error. La industria farmacéutica y la automovilística también están evaluando la posibilidad de utilizar esta tecnología.
