Emprendedores mexicanos crearon La Grilla, una cerveza a base de insectos para reivindicar el consumo de estos animales como una alternativa ante la crisis climática. La idea de integrar el grillo como la materia prima de esta cerveza surgió en Querétaro, en el centro de México, como asociación de los creadores de Santena, un emprendimiento que ofrece diversos productos alimenticios a base de insectos, y Cervecería Punto Medio, otra empresa local que se dedica a la cerveza artesanal.