Es lo que tradicionalmente se llama ir a por lana y acabar trasquilado.
Algo así fue lo que le sucedió al presentador del espacio 'El Ágora', en 'Hora 25' (Cadena SER) cuando quiso incordiar a Alberto Núñez Feijóo preguntándose por qué no aceptaba la oferta lanzada por Pedro Sánchez de tener seis cara a cara desde aquí hasta finalizar la campaña electoral del 23 de julio de 2023.
El presentador del Grupo PRISA le lanzó directamente la cuestión a José Manuel García-Margallo y este era claro y contundente en su respuesta:
Pues por coherencia con el historial de cada uno. Yo recuerdo, porque ya soy muy viejo en estas lides. En 2016 acompañaba a Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, que se sabía perdedor, pidió debates, el máximo posible. En 2019 Sánchez se sabía ganador y fue Pablo Casado, que iba detrás, él que pidió debates a dos. Y estuvo muy brillante Sánchez en una entrevista con Julia Otero en la que dijo que eso era una estupidez, que los debates o eran a cinco o no eran debates, que eso era menospreciar al resto de los candidatos.
El exministro de Exteriores, con mucha retranca, añadió:
Ahora parece que ha cambiado la doctrina y parece que quiere imponernos la agenda a todos los demás. Núñez Feijóo encuentra ventaja en ir a la calle, en hablar con la gente, que es lo que tiene que hacer y a mí me parece que Sánchez prefiere un estudio de radio, a ser posible una radio amiga, para estos debates. Y sus socios han dicho que esto es minusvalorar sus posibilidades electorales y alterar el juego limpio.
Margallo recordó lo que el propio Sánchez contó en Onda Cero o las declaraciones que por aquel entonces hizo el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, cuando Pablo Casado (PP) pidió esos debates a dos en 2019:
Insisto, no hay más que ver la entrevista con Julia Otero o las declaraciones que hizo José Luis Ábalos en aquel momento para impugnar el debate a dos y favorecer el debate a varios como exigencia del juego limpio y lo que está diciendo ahora. Pero eso no es novedad en Pedro Sánchez.