Yassine Kanjaa, el presunto yihadista que el pasado enero protagonizó un ataque en Algeciras que se saldó con la muerte de un sacristán y con varios heridos, aseguró ante los agentes que se sentía "un elegido" de Alá y que el asesinato del religioso le abrió "las puertas del paraíso".
(Fuente: Twitter, Policía Nacional, Europa Press)