Dicen que no hay peor cuña que la de la propia madera.
Y lo cierto es que lo de las correrías del exdiputado socialista Juan Bernardo Fuentes Curbelo, 'Tito Berni', huele tan mal que hasta dentro de las filas socialistas hay quienes no pueden defender el argumentario ordenado desde Moncloa por Pedro Sánchez.
Baste con ver la intervención de un socialista de toda la vida como Eduardo Madina en la Cadena SER para ver que no siempre la filiación a una organización política es sinónimo de tener que comulgar con ruedas de molino.
Así se mostró de contundente este político vasco cuando fue preguntado por lo que le parecía este turbio asunto y si daba credibilidad a todo lo que se ha venido publicando en los medios de comunicación en torno al 'caso Mediador'.
Empezó asegurando que durante sus legislaturas como diputado en el Congreso él no tenía la costumbre de unirse a esas cenas de las que ahora tanto se está hablando:
Yo cuando fui diputado durante 13 años tenía tendencia de cenar en mi casa. El trabajo que tenía, sobre todo en la dirección del grupo, no era compatible con una vida social nocturna. De día comía con mis amigos, con Meritxell Batet, con Juan Moscoso… mis colegas de ahí.
¿Esto es detectable? Yo creo que sí. Sobre todo si pasa por delante de ti la quinta temporada de Torrente. Si pasa la quinta temporada de Torrente, si pasa por delante de mí un señor cobrando comisiones por intervenir defendiendo no sé qué sectores…consumiendo todo eso… Yo creo que la quinta temporada de Torrente es perceptible y que hay que ser un poco corto para no verla.
Sí es verdad que Madina reconoció que hay casos en los que los autores de estas corruptelas actúan de manera limpia y profesional:
Dicho esto, luego hay profesionales, ha habido gente de primera que no detectas nada y que de repente tenía detrás toneladas de corrupción. Algún caso ha habido, como siempre. ¿Todos los políticos? Pues no, muy pocos en el conjunto de los cargos públicos que ha habido en la democracia española.