Si prefieres acostarte más tarde, es posible que corras un mayor riesgo de padecer diabetes de tipo 2 y cardiopatías, según un nuevo estudio.
Según el estudio, los noctámbulos son más sedentarios, tienen una forma física más baja y queman menos grasa mientras están activos que los madrugadores.
Los noctámbulos también son más propensos a ser resistentes a la insulina, por lo que sus músculos necesitan más insulina para obtener la energía que necesitan.
"Hay pruebas sólidas de que ser trasnochador se ha relacionado con un mayor riesgo de enfermedades metabólicas y cardiovasculares", afirma la Dra. Phyllis Zee, profesora de neurología de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern.
Los madrugadores suelen rendir mejor en la escuela y son más activos a lo largo del día.
Esto puede explicar en parte por qué los estudios han descubierto que tienen menos riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
En cambio, los noctámbulos corren más riesgos y consumen más tabaco, alcohol y cafeína.
Además, es más probable que se salten el desayuno y coman más a última hora del día, lo que hace que engorden más rápido.