Tiene 79 años, pero está en plena forma.
Al menos a la hora de sacar a paseo su lengua viperina.
Maruja Torres, la que en su momento fuese una de las periodistas pilares de El País, lleva un tiempo más que suficiente resentida con la vida.
Y en la noche del 26 de febrero de 2023 lo demostró en el programa 'Lo de Évole' (laSexta)
El presentador, Jordi Évole, en su faceta más gamberra, más propia de la de su etapa como 'El Follonero', fue empujando a su entrevistadora hasta llegar hacia donde él quería, que se pusiera a vomitar improperios contra determinados periodistas.
El comunicador catalán, con ese tono de impostada ingenuidad, le cuestionaba a su interlocutora sobre qué opinión tenía del periodismo actual en España, al menos de una parte del mismo, incitando claro está a que la señora Torres desbarrase.
Y, evidentemente, el objetivo lo consiguió.
La también escritora fue a saco:
Yo creo que hay exceso de opinión, porque es muy barata. Y falta de reporterismo. Eso, hablando en general, me parece que es lo más grave que nos ha pasado. Y la falta de crónicas.
Por supuesto, a desmontar clásicos adoptados por muchos de los profesionales del periodismo:
Ryszard Kapuściński ha hecho mucho daño con eso de que hay que ser buena persona para ser periodista. Yo he conocido muchísimas malas personas siendo excelentes periodistas que me han pasado la mano por la cara.
A partir de ahí, comenzó su recital de insultos e improperios a partes iguales:
Este oficio está lleno de hijos de puta, o de jetas o canallas, que no quiero ofender a las putas.
Acusó a sus propios compañeros de profesión, a los que no escriben al dictado de la ideología que profesa Maruja Torres, de ser difusores de bulos y además de hacerlo de manera deliberada:
Todo a lo que estamos asistiendo ahora, que asistimos, y mucho, y desde muchos sitios y en muchos medios, es a gente que miente deliberadamente. Lo primero que son es malos periodistas, porque si fueran buenos periodistas, no se permitirían protagonizar esas mierdas que escriben y esas mierdas que vomitan.
Pero a Jordi Évole lo que realmente le obsesionó en la entrevista es que al final Maruja Torres acabase por dar nombres, al menos uno.
El presentador de la segunda de Atresmedia quería conocer qué periodistas, en opinión de Torres, estaba intoxicando la profesión periodística.
Y las fantasías oníricas del periodista de laSexta acabaron materializándose porque su invitada acabó poniendo el foco sobre un director de medios de comunicación, el responsable de OkDiario, Eduardo Inda, un comunicador con el que Évole no comulga e intenta desacreditar a la menor ocasión:
A mí me parece Inda un personaje nefasto. Yo creo que representa la venganza, el bulo, el amarillismo interesado... Hay tantos.
