(Reuters)- Las últimas imágenes del volcán activo más grande del mundo, el Mauna Loa de Hawái, muestran cómo además de verter su poderosa lava, ahora también arroja gas y cenizas al cielo. Las autoridades de la zona vigilan constantemente el avance de las lenguas de fuego, auténticos ríos de lava buscando su salida natural. Hasta el momento la población del sur de la isla, donde está ublcado el volcán, no se ha visto en peligro. El volcán entró en erupción el pasado 27 de noviembre y ningún experto aventura cuando las entrañas de Mauna Loa pararán.