(Reuters)- El continente sufre los efectos de La Niña, un fenómeno meteorológico que trae un aumento considerable de las precipitaciones, y con ésta ya afronta su cuarta gran crisis de inundaciones este año. Una docena de helicópteros barre Nueva Gales del Sur, el estado más afectado, en busca de personas atrapadas. Muchos son rescatados en sus tejados. Sólo ayer lunes se llevaron a cabo más de 200 operaciones de rescate en donde hasta los servicios de emergencia se ven comprtometidos. La ciudad de Cowra, a 300 km de Sydney, recogió 120 litros por metro cuadrado en 24 horas. Es la descarga más contundente de los últimos 118 años. Las fuertes precipitaciones cortaron carreteras, sorprendieron al ganado e inundaron cientos de casas y comercios.
RC