Al fondo de un salón en el Hotel Four Seasons de la Ciudad de México, rodeado de cámaras, iluminado por un juego de luces profesionales y un equipo amplio de asistentes, está sentado Hugo Sánchez, en espera de una nueva entrevista en este día de medios para promocionar su serie documental 'Hugo, gol y gloria'. Las entrevistas giran en torno a esa gran carrera, le preguntan por el Mundial del 94, por los Pumas de antes y los de ahora, por la Selección Nacional de México. Pero tan raudo y veloz como en su etapa de jugador, Hugo Sánchez libra todas las polémicas y siempre recuerda a su entrevistador que ha cumplido su sueño de niño contra todas las adversidades. El documental, insiste, contiene un fuerte mensaje de la metodología que usó para triunfar en su carrera y que es un audiovisual que se ha trabajado desde hace seis años, por lo que incluso incluye momentos muy delicados, como el fallecimiento de hijo Hugo Sánchez Portugal. Amable, sonriente, Hugo Sánchez relata anécdotas fuera de micrófonos, porque ante la cámara se privilegia la promoción. A mediotiempo le cuenta cuando compartió programa de televisión con el gran Pelé allá por 1982, cuando el brasileño ya estaba en el retiro. Son pocas las preguntas que responde porque el tiempo apremia, pero cuenta que quiere ver más mexicanos en Europa, que recuerda a Pumas con cariño y que el entrenador Luis Aragonés le dejó una de esas enseñanzas de por vida.
