El Banco Central Europeo (BCE) ha cuestionado distintos aspectos del impuesto temporal que el Gobierno español quiere imponer al sector bancario al considerar que el gravamen podría llegar a poner en peligro una transmisión fluida de las medidas de política monetaria, añadiendo que el importe del mismo podría no ser proporcional a la rentabilidad de las entidades y expresando la importancia de que pueda repercutirse a los clientes.
(Fuente: EBS/ Europa Press)