(Reuters)- La ayuda militar empezó a llegar luego de que el huracán Ian azotó Florida. Las casas y calles quedaron totalmente devastadas; sin embargo los habitantes se resisten a salir de allí, y sólo las personas mayores aceptan ser evacuados. El gobernador de Florida confirmó que el 93% de la población ya tiene luz. No obstante, hubo 80 muertos y 10.000 desaparecidos.