(Reuters)- Ucrania expulsó a las fuerzas rusas de las afueras de Járkov en mayo, pero la ciudad sigue bajo fuego. Rusia niega atacar civiles, pero los edificios residenciales de la ciudad, están completamente destruidos, hacen la vida imposible a personas no videntes, que aunque no pueden verla, sienten muy de cerca el horror de la guerra.
AMM