El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, autorizó personalmente la decisión de solicitar la orden de registro del pasado lunes a la residencia del ex-presidente Donald Trump en Florida, y ha pedido este jueves autorización a un tribunal del sur de este estado para que haga pública dicha orden.
En una breve declaración tras la cual no aceptó preguntas, Garland defendió la legalidad del registro y señaló que este tipo de decisiones no se toman "a la ligera".