Está claro que la cosa pinta regulera para Pablo Iglesias.
En poco más de dos años, el fundador de Unidas Podemos ha pasado de tenerlo prácticamente todo, a quedarse fuera de cualquier ámbito de poder.
Después de su doble espantada, primero del Ejecutivo de Pedro Sánchez para intentar arrebatarle la Presidencia de la Comunidad de Madrid a Isabel Díaz Ayuso y, seguidamente, renunciar a tomar posesión de su escaño en la Asamblea madrileña tras el revolcón sufrido en las urnas, su panorama laboral se fue estrechando a colaboraciones efímeras en medios de comunicación.
El retorno de Iglesias a la escena política es muy improbable, por lo que podría volver a impartir clases en la Universidad Complutense.
Él mismo informa en su cuenta de Twitter que acaba de presentarse para la plaza de profesor asociado de Políticas y Ciencias de la Información, con el consiguiente ‘troleo’ de los internautas, que le dedicaron tuits diciendo que “es evidente que se lo van a dar. Y no por sus capacidades” y que se deje “de tanta palabrería, que todos sabemos es enchufismo”.
