Eurico Campano: “Sánchez se arrastra ante el sultán pero ignora sus fosas comunes”

2022-06-28 376

¡Qué lío esto de ser progre y gobernar y no saber exactamente dónde colocar el listón! ¿Verdad, Pedro Sánchez?

No te lo habían contado cuando llegaste a La Moncloa y tampoco habías tenido la fortuna de hablar con gentes tan válidas, exministros de gobiernos que te precedieron como Eduardo Sotillos, que relataba aquella anécdota de Felipe González:

- ¿Qué es lo más difícil de ser presidente del gobierno?
- El que, por cientos de asesores que tengas, cuando hay que tomar al final una decisión, el último teléfono que suena es el tuyo.

Lo sabían bien González y lo sabían también Aznar, Rajoy, por supuesto Suárez y Calvo Sotelo e incluso Zapatero, del cual teníamos una patética opinión hasta que llegó Sánchez y la mejoró exponencialmente.

Viene esto a cuento del último 'fuego' que le ha surgido a 'Su Sanchidad': el del intento de asalto de decenas de inmigrantes -que no migrantes porque eso queda para las aves- marroquíes a la valla de Melilla. Esto dio lugar a una contundente intervención de miembros de la Gendarmería marroquí junto con las FSE a consecuencia de la cual resultaron muertos 37 inmigrantes según alguna ONG y 23 según fuentes gubernamentales del país vecino. Son tremendas las imágenes que hemos visto y que les ahorraremos pero que han reproducido con profusión los medios 'progres' que debían pensar que Marruecos era 'Disdeylandia'.

¿Dónde está el lío? El lío está en que Pedro Sánchez, con sus declaraciones torpes, apresuradas, poco meditadas y atolondradas, ha sido incapaz de hilar una sola idea coherente, colocar como decía el listón en su justa medida y no ha satisfecho ni a unos ni a otros. Ni a los que pensamos que ahí abajo hay un problema real y serio que acabará comiéndonos la vida ni tampoco a los comunistas de salón, a cinco de los cuales mantiene en su gobierno, que debían pensar que la Policía y la Guardia Civil están allí para dar tiritas.

Pedro Sánchez ha lamentado la pérdida de vidas humanas. Estaría bueno que no lo lamentara, pero esperamos que haga algo más además de lamentarlo. El problema es que el presidente español felicitaba a las autoridades marroquíes por su eficacia en la resolución del conflicto, lo que ha irritado a Yolanda Díaz y sus conmilitones. ¿Qué ironía, que los que nos envían a los inmigrantes sean los que nos venden después la solución!