Macarena Olona no dudó en caldear el ambiente de la primera de las grandes citas de la campaña de las elecciones andaluzas del 19 de junio: el debate de RTVE entre las seis candidaturas a presidir la Junta de Andalucía.
La candidata de VOX reconoció sentirse feliz de que “por fin aceptasen sentarse conmigo y con VOX en un debate”. ¿El motivo?, “que habían hecho lo imposible para evitar ese enfrentamiento entre propuestas y programas”.
Un ‘zasca’ que recuerda a la polémica del 10 de mayo, cuando Olona acusó a COPE de organizar un debate electoral con “censura”.
La candidata de VOX dejó claro que “estoy deseando poder hablar de las necesidades reales de los andaluces y sobre qué ofrecemos cada uno”. Sin embargo, no es lo único que espera, ya que considera que es la oportunidad idónea para “ver qué nos dicen quienes han sido parte del problema en Andalucía y que, por ello, no pueden ser parte de la solución”.
Una frase que fue un bofetón especialmente al PSOE, que cuenta con un grave historial de corrupción en la comunidad autónoma tras el escándalo de gastar el dinero de los parados en prostitución y drogas.
“¿Con qué cara van a volver a mirar a cámara a los andaluces para prometerles, una vez más, las mismas promesas?”, sentenció Olona.
