El gobernador Rafael Lacava denunció por difamación al defensor de los derechos humanos, Marino Alvarado y al sacerdote Alfredo Infante, por un informe relacionado con ejecuciones extrajudiciales que involucra a funcionarios del Estado Carabobo. En respuesta, el sacerdote recordó al mandatario regional chavista que pedir una investigación no es delito.