Las personas que no encienden la cámara durante las reuniones de trabajo no tienen futuro en sus empresas. Esa es la opinión de 92% de los ejecutivos consultados en esta encuesta.
En este porcentaje también se incluye a quienes pasan la mayor parte de las reuniones con el micrófono en silencio. Según la encuesta, 93% de los mandos empresariales cree que estas personas no están poniendo atención.
Pero claro, quienes no estamos en las altas esferas del mundo corporativo sabemos que las cámaras pueden estar apagadas por muchas razones, desde familiares escandalosos hasta el fenómeno conocido como “fatiga de Zoom”.
Esta investigación explica que la fatiga no está necesariamente relacionada con tener muchas reuniones virtuales, sino con dejar la cámara encendida la mayor parte del tiempo.
Y es especialmente agotador para las mujeres, sobre quienes pesa la expectativa de lucir presentables tooodo el tiempo, y para los empleados nuevos que quieren proyectar una buena imagen profesional.
En qué equipo estás, ¿cámara encendida o apagada?
