Comitancillo (Guatemala) 13 mar (EFE)(Imágenes: Esteban Biba).- Hace siete semanas los familiares de 16 guatemaltecos migrantes originarios del municipio de Comitancillo, al oeste de Guatemala, recibieron llamadas y mensajes que les alertaba sobre un accidente de automóvil en la zona fronteriza de México con Estados Unidos.
El supuesto accidente que les reportaron entonces los coyotes se trataba en realidad de una masacre en el poblado de Santa Anita, municipio de Camargo, donde 19 personas fueron baleadas y calcinadas. Solo tres de los muertos no eran guatemaltecos.
Siete semanas después, las familias guatemaltecas rindieron este sábado los homenajes y velaron a las víctimas de presuntos sicarios del Cartel del Noreste, los antiguos Zetas, que buscaban a un mando del Cartel del Golfo, la organización que controla la zona en Tamaulipas.
Edición y locución: Tatiana Rodríguez G.
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