La OMS (y la mayoría de organismos dedicados a la salud de los niños) recomienda lactancia materna exclusiva durante 6 meses y acompañada de otros alimentos hasta los 2 años o más siempre que la madre y el bebé lo deseen. Si dejamos a un niño que mame hasta que desee, la edad natural de destete se situaría entre los 2 y los 7 años, pero a veces llega un momento en que las madres deseamos destetar. Lo ideal es hacer el destete de manera respetuosa para que el niño no sufra, aunque esto lleve algún tiempo. Miryam Triana, responsable de la Consulta Médica de Lactancia Materna del Hospital Vithas Nisa Pardo de Aravaca nos cuenta cómo hacerlo.
A partir de los 2 años los niños comprenden todo y muchos son capaces de expresarse con palabras, así que podemos explicarles cariñosamente que deben ir dejando el pecho poco a poco. Un “lema” fundamental para el destete es “No ofrecer, no negar”. Si lo piden, damos, pero no seremos nosotras las que lo ofrezcamos.
La parte “nutricional” de la lactancia es fácil sustituirla a esta edad por cualquier otro alimento. Así, si nos lo suele pedir para desayunar, podemos anticiparnos y ofrecerle un vaso de leche, por ejemplo; y si suele tomar leche materna como postre de la comida, “cambiarlo” por un yogur.
Pero el pecho también es consuelo, son mimos y puede ser una “herramienta” para dormir. Eso puede costar un poco más… El chupete a partir de los 2 años no es recomendable y muchos de los niños que lactan ni siquiera lo han llegado a coger, pero en caso de rabieta/caída/lloros podemos dar abrazos, besos, caricias… en vez de pecho.