Madrid, 27 oct (EFE).- La declaración del estado de alarma ha acelerado las restricciones para hacer frente a la grave escalada de la pandemia: a los generalizados toques de queda comienzan a sumarse nuevos confinamientos, en Euskadi, Aragón o Asturias, con la vista puesta en el puente de Todos los Santos, o límites a las reuniones privadas, circunscritas en Navarra a las personas que vivan juntas.
El crecimiento de la curva de contagios de coronavirus, que hace tres semanas parecía estabilizarse, ha vuelto a romper al alza con datos tan implacables como los 52.188 contagios notificados desde el pasado viernes, con una incidencia en los últimos 14 días (IA14) por cada 100.000 habitantes de 410 casos y una media de cerca de un centenar de fallecidos diarios.
INCLUYE DECLARACIONES DE FERNANDO SIMÓN (IMÁGENES DE MONCLOA)
Locutado: Rodrigo Fuentes Tello.