Buenos Aires, 22 abr (EFE).- El talento, la humildad y el ingenio de Marcos Mundstock, uno de los fundadores del emblemático grupo humorístico Les Luthiers, dieron este miércoles una vez más la vuelta al mundo cultural hispanoamericano, pero esta vez rodeados de la tristeza que deja su muerte, la de un genio de voz rotunda.
"Después de más de un año de lidiar con un problema de salud que se tornó irreversible, Marcos, nuestro compañero y amigo, finalmente partió". Con estas sentidas palabras, los actuales integrantes del conjunto argentino, fundado en 1967, daban el último adiós a su compañero, que ejercía como narrador, actor y guionista.
La muerte de Mundstock, a los 77 años en su domicilio de la ciudad bonaerense de Vicente López, según confirmaron a Efe fuentes de su entorno, se produce menos de un lustro después de la igualmente llorada desaparición de Daniel Rabinovich, con quien creó Les Luthiers junto al también fallecido Gerardo Masana (1937-1973) y Jorge Maronna, aún miembro activo del grupo.
UNA ENFERMEDAD QUE LE ALEJÓ DE LOS ESCENARIOS
Fue en febrero del año pasado cuando el polifacético artista, nacido en Santa Fe en 1942, se vio obligado a no participar de una entonces inminente gira por España, con el fin de realizar un "tratamiento médico impostergable", según se explicó.
Su papel, que ya no volvió a representar por la larga enfermedad que debió enfrentar, y que no se desveló, quedó a cargo del actor y director de teatro Roberto Antier, reemplazante estable de Les Luthiers desde hace un lustro.
Tampoco pudo acudir al Congreso Internacional de la Lengua Española, realizado a finales de marzo de 2019 en la ciudad argentina de Córdoba, pero para la posteridad quedó el ocurrente, divertido y genial vídeo que grabó para la ocasión y con el que, una vez más, logró despertar las carcajadas de cientos de personas gracias a sus juegos de palabras y su potente voz.
Su fallecimiento llega en un momento marcado por el confinamiento social que rige en Argentina por la pandemia del coronavirus, por lo que de momento se descarta una despedida pública.
LUTO EN EL MUNDO DE LA CULTURA
Al conocerse la muerte de Mundstock, poco tardaron en estallar las redes sociales de frases de condolencias y admiración hacia un hombre que si bien había abandonado la carrera de Ingeniería en el tercer año, el destino quiso que, en el coro universitario conociera a sus futuros compañeros de Les Luthiers, con quienes hizo historia.
"Fue un artista ingenioso con las palabras en lengua española, de humor rápido, una figura querida y respetada en todo el mundo. No había guión que se le resistiera. Su manera de abordar un texto, de hacer pensar y hacer reír a la vez, hilarante y ecléctico como pocos, uno de los integrantes más poderosos de los ya poderosos Les Luthiers", plasmó el Ministerio de Cultura de Argentina en su página web.
La cartera recalcó que "en estos tiempos difíciles", las "memorias de la risa" y "los recuerdos de la alegría compartida" generan