Jerusalén, 3 abr (EFE).- (Imagen: Joan Mas Autonell) Ocho monjes franciscanos con mascarilla recorrieron hoy, Viernes de Dolores, la Vía Dolorosa de la Ciudad Vieja de Jerusalén para recrear el Vía Crucis, una procesión que se repite cada semana y que esta vez transcurrió con las tortuosas calles desiertas y a dos días de comenzar una Semana Santa que este año se celebrará en una situación excepcional: sin peregrinos debido a las severas restricciones de movimientos impuestas por la pandemia de coronavirus COVID-19.