Madrid, 7 mar (EFE).- Estoica, superviviente como pocas, Isabel Pantoja ha salido este viernes indemne de una "noche embrujada" de dificultades técnicas y prehisteria colectiva por el coronavirus que lleva a muchos a evitar multitudes como la congregada para celebrar con ella 50 años de música.
Como un bálsamo que merece la pena probar siempre que hay ocasión, cerca de 12.000 personas (según su promotor) han hecho oídos sordos a los alarmistas para disfrutar en el Wizink Center de la única cita que la diva ha dispuesto como retorno a los escenarios tras dos años de intensa agenda televisiva alejada de ellos.
Libre, sin casa discográfica que la tenga "enganchada" por primera vez en su carrera y con todo listo para lanzar en otoño "el álbum que le ha dado la gana grabar", la Pantoja ha salido en Madrid "como una fiera", tal y como anticipaba a Efe, "para ese público que lo merece todo" y que ya la abrazó en 2017 en este mismo espacio tras cumplir condena carcelaria.
IMÁGENES INICIO Y DEL PRIMER TEMA DEL CONCIERTO
Imagen: Raúl García. Locución y montaje: Rodrigo Fuentes Tello.