Vladimir Putin, el multifacético y poderoso Presidente de Rusia, cultiva con esmero una imagen de luchador feroz.
En todos los campos. Enérgico y carismático, ha vuelto a posicionar a Rusia como una potencia de primer orden mundial.
Muchas veces retratado como figura militar o por su pasado como espía de la KGB, a veces da la impresión de que pone especial empeño en marcar distancia con homólogos como Donald Trump y algunos mandatarios europeos, a los que en privado tilda de 'blandos'..
El nuevo y parece que eterno zar ruso, es un disciplinado artista marcial, que comenzó a muy temprana edad a practicar sambo, una especie de técnica de combate rusa y también el judo, deporte en el cual es cinturón negro.
