Un reciente estudio realizado por expertos de la Universidad de Tel Aviv, Israel, afirma que la mayor parte de los objetos avistados y descritos como OVNIS, son simples combinaciones de nubes tormentosas, luz y electricidad, que por su forma de manifestarse, pueden inducir fácilmente a engaño en la percepción.
Los científicos señalan, que el alto índice de avistamientos registrados cada año, les hizo pensar que debía tratarse de un fenómeno más terrestre que extraterrestre.
En concreto, existe un curioso fenómeno natural bautizado como 'sprites', que son rápidas descargas eléctricas que se generan durante las tormentas a 70 y 110 kilómetros sobre la superficie de la Tierra, moviéndose a gran velocidad por la atmósfera, y cuya manifestación coincide con las descripción de luces que parecen danzar sobre las nubes, describiendo movimientos que desafían la gravedad.
Los 'sprites' han estado siempre ahí, pero fueron descubiertos por azar en 1989, mientras un investigador calibraba una cámara para sacar fotos a las estrellas.
Colin Price, jefe del departamento de Geofísica y Ciencias Planetarias en la Universidad de Tel Aviv, cree que los 'sprites' pueden explicar muchos de los casos de avistamiento OVNI, pero sólo los que se dan en invierno y en el hemisferio norte, que es dónde único se produce este fenómeno en todo el planeta.
Los acontecidos todo el año en el hemisferio sur, o en verano en el hemisferio norte, siguen siendo un misterio por resolver.