En Dominica, las acciones desestabilizadoras emprendidas por la oposición son reales, pero suceden no en la capital sino en las afueras, principalmente en el barrio de Marigot. Aunque no han tenido el impacto que esperaban, varios vuelos se han suspendido y los barcos cruceros no han atracado en el país, lo que genera un impacto negativo en la economía del sector turístico. teleSUR