Hong Kong, 28 nov (EFE).- Cócteles molotov, barricadas levantadas con mobiliario, un reguero de máscaras antigas, cascos, paraguas y mochilas, y un olor nauseabundo, es el desolador panorama que se respira en la Universidad Politécnica de Hong Kong, donde hoy entró la policía después de once días de asedio.
Imagen: Sara Gómez Armas.