Lo repiten por activa y por pasiva. En sus mitines, en debates, en entrevistas, en actos polémicos frente a centros que los acogen. El partido de Santiago Abascal ignora que atentar contra los derechos de los menores va contra la Constitución. Les da igual. Se han propuesto achacar a la inmigración todos los males que, a su parecer, sufre España por culpa de los inmigrantes. Sus acciones tienen consecuencias. Se exacerban los delitos de odio.