Hola, soy Charles. Recientemente me declaré gay, y eso ha tenido sus propias... extrañas repercusiones.
Cuando tenía 15 años, tuve una novia, Rebecca, y de verdad me gustaba, ¡incluso la amaba! Pero me sentía raro, como... que algo estaba mal. Empecé a notar que... Me gustaban más los chicos. Y quiero decir que siempre me gustaron, simplemente no me había dado cuenta... Salí con Rebecca por un tiempo después de eso, pero luego quise hablar con ella.
Le expliqué, lo mejor que pude, que no era ella, sino yo. Todavía quería ser su amigo, porque ella era una persona muy importante para mí. Estaba molesta, pero fue muy compasiva y comprensiva, y me sentí aliviado.
En seguida se lo confesé a todos mis amigos. Esperaba que se burlaran de mí o se sorprendieran, pero más bien... a nadie le importó tanto, y algunos de ellos incluso lo esperaban. ¡Fue mucho más fácil de lo que pensé!
Por supuesto, sabía que otras personas se enterarían pronto, pero no esperaba lo que sucedió después... Un día, en la escuela, estaba buscando en mi mochila un libro cuando encontré una... ¿carta? La abrí y había... eh, ¿amenazas? Por supuesto, había insultos, pero también cosas como, y no estoy citando directamente, pero básicamente decía: "Vete a otra escuela, no necesitamos personas como tú aquí". Miré a mi alrededor, pero no había nadie. Me sentí asustado. Pensé que uno de mis amigos me estaba haciendo una broma, pero ellos nunca harían algo así.
Rápidamente lo olvidé, pero luego volvió a suceder. Esta vez, alguien me envió un mensaje privado a mi Instagram de forma anónima con más insultos y amenazas. Pregunté quién era, pero me ignoró. A la única persona a la que le compartí eso fue a Rebecca, ¡y ella estaba tan conmocionada por eso!
Pero la gota que derramó el vaso para mí fue cuando encontré una caja rara en mi porche. Me alegré de haberla encontrado antes que mis padres. La abrí... y estaba llena de basura, y había otra carta que decía: "Tú también perteneces aquí". ¿¡Qué!?
En ese momento tenía tanto miedo de ir a la escuela o a cualquier otro lugar que me la pasaba mirando a mi alrededor, siempre buscando a esa misteriosa persona. Nunca le dije nada sobre esto a nadie, ni siquiera a Rebecca.
Otra cosa sucedió un poco después: un día, de pronto, todos sabían que yo era gay. No tenía idea de cómo sucedió eso, pero supongo que alguien comenzó a propagarlo a todos los que conocía. ¿Sabes? Incluso los maestros ya lo sabían en ese momento. Y, para ser sincero, no estuvo tan mal. Nuevamente, a nadie le importó tanto, y muchas personas en verdad me apoyaron.
Solo había un chico al que apenas conocía, Shawn, que seguía mirándome extrañamente. Y no solo eso: dejó de decirme "Hola", y siempre trataba de mantenerse lo más lejos posible de mí. Pensé que él era parte de esto, o tal vez ÉL era la persona que me enviaba todas esas amenazas.
Un día llegué a casa y mis padres com
