Cadáveres en la calle, impactos de bala y charcos de sangre eran parte del escenario en las calles de Culiacán el viernes, tras enfrentamientos armados en la ciudad del noroeste de México en el que la policía detuvo el jueves a uno de los hijos del capo de la droga Joaquín “Chapo” Guzmán, pero lo liberó más tarde.