Estáis en casa, tranquilos, si hace falta me pongo en la puerta".
Eso decía Raimon Senpau, director del Hotel Condes Barcelona, a un centenar de CDR y manifestantes que huían de la policía autonómica en el Paseo de Gracia, tras incendiar barricadas, apedrear a los agentes y agredir a varios viandantes.
La ciudad ardía este 15 de octubre de 2019 debido a los actos violentos de los manifestantes y el fanático Senpau, lejos de facilitar la labor a los agentes antidisturbios, convirtió el hotel en el refugio de los CDR.
En la escena, grabada por un cliente que ha jurado no volver jamás a semejante antro, aparece el responsable hotelero sujetando la puerta con la intención de impedir el paso a cualquier efectivo policial que intentara acceder.
Seguidamente, los jóvenes separatistas sectarios aplaudieron con entusiasmo el apoyo al independentismo que Senpau estaba protagonizando.
la desvergüenza del director del complejo turístico ha provocado un seísmo entre los usuarios internautas y los turistas que allí se encontraban.