La red de burbujas es una sofisticada estrategia de caza utilizada por las ballenas jorobadas que se reúnen cada verano a cazar en Alaska, como viejos amigos.
Desde las profundidades, un círculo de burbujas efervescen hacia la superficie. Como si se tratara de una especie de nado sincronizado, poco a poco, las ballenas jorobadas emergen en una misma circunferencia. A veces sacan las aletas. Otras, esconden la cabeza por debajo de las olas. Todas cantan y lanzan agua. En esta sincronía acompasada, están poniendo en marcha una sofisticada estrategia de alimentación: la red de burbujas, que les garantiza un almuerzo rico en los peces que tienen en la mira.
Este comportamiento rara vez ha sido observado en la naturaleza. Sin embargo, Brian Skerry dedicó largos meses de su vida para documentarlo en la serie más reciente de National Geographic: Secrets of Whales. El segundo episodio está dedicado a las conductas culturales de las ballenas jorobadas, cuyas estrategias de caza y alimentación no se repiten en otras especies de cetáceos.
Así como diferentes países tienen prácticas propias, algunas especies de ballenas también tienen exclusividad en sus formas de conseguir comida. El caso de las jorobadas es icónico, ya que lo hacen únicamente en Alaska, mientras permanecen ahí durante el periodo veraniego. Además, a diferencia de lo que podría pensarse, no lo hacen en familia. Por el contrario, escogen a sus mejores amigos para llevarlo a cabo.
De acuerdo con el experto, los ejemplares que participan en la red de burbujas no están relacionados por sangre. Esto indica que son individuos de familias diferentes, que se reúnen cada verano a cazar como viejos amigos. Algunos de ellos llevan más de 40 años haciéndolo. Skerry asegura, después de observarlas por tanto tiempo, que esta conducta revela una alta inteligencia biológica y una amplia vida interior, que les permite mantener relaciones afectivas de este tipo por tanto tiempo.