Situada en medio del Océano Pacífico, a 3.525 kilómetros al oeste de Chile, Isla de Pascua, o Rapa Nui, es una de las dos islas más aisladas del mundo. Además de la imagen paradisíaca de la que disfrutan muchas islas polinesias, Isla de Pascua fascina y atrae por sus singularidades. Descubierta en 1722 el día de Pascua por el explorador holandés Jacob Roggeveen, esconde secretos que hasta hoy cautivan. Sin duda el símbolo de Rapa Nui son los moais, levantados por sus primeros habitantes, son más de mil las estatuas de toba volcánica que adornan el paisaje. Se cree que representaban las casas de los espíritu, pero su aún misterioso origen, atrae a turistas de todo el mundo cada año. Los pascuenses o rapanui, trabajan activamente para preservar su hábitat y una estricta ley aprobada en 2018 ahora protege a la isla de la sobreexplotación. La cultura Rapanui y su increíble riqueza fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1995. Isla de Pascua es un destino para soñar, para aventurarse y para viajar a un tiempo totalmente distinto.