Las fuerzas de paz de la ONU acumulan miles de denuncias por supuestos abusos sexuales a adolescentes desde hace dos décadas.
La ONU intenta desde entonces poner fin a esta explotación sexual pero ni la institución, ni los estados miembros han priorizado y solucionado esta grave situación.
Más de 2.000 adolescentes de 12 a 17 años han denunciado a miembros militares y civiles de los cascos azules de la ONU por agresión sexual en las misiones de paz repartidas por el mundo.