Cada vez sufriremos más lluvias torrenciales. Más trombas exprés como la de los últimos días. Y detrás de ellas: el imparable cambio climático. Los expertos de la AEMET alertan de la tendencia a repetirse estos fenómenos con más frecuencia y con más intensidad. Si en Vinarós (Castellón) cayó el record de lluvia acumulada en una hora. En Sant Llorenç (Mallorca) ya padecieron 233 litros en solo 4 horas. Y en Alpandeire (Málaga), este fin de semana, han descargado 347 litros en 12 horas. Las consecuencias van desde las desgracias materiales hasta las tragedias humanas. Hoy algunos alcaldes de Málaga pedían explicaciones a la Junta de Andalucía después de un fin de semana con el agua al cuello. Pero solo la planificación y las alertas podrían evitar imágenes de angustiosas inundaciones.
-Redacción-
