Se acelera el número de patinetes eléctricos circulando por la ciudad. Vehículos que ocupan la calle y algunos lo hacen demasiado rápido para tratarse de zonas en las que tienen que convivir con los peatones. En Sabadell se investiga un accidente que ocurrió el pasado 9 de octubre. Una vecina de 39 iba con su patinete eléctrico y al cruzar un paso de peatones el semáforo se puso en rojo, ella no tuvo tiempo de parar y un camión la atropello. Tras varios días ingresada en el hospital esta semana ha fallecido. Para detener este vehículo no sirve cualquier tipo de freno. Se recomienda un freno a disco, como el de una moto, que detiene el vehículo al instante. Sin embargo, los frenos electrónicos de algunos patinetes provocan una desaceleración que se convierte en un peligro. Un medio de transporte que, además, por la noche es difícil de detectar por los conductores de vehículos y que por el día se pierde entre los peatones que andan por las aceras y se ven sorprendidos por la circulación de patinetes. Madrid, Barcelona o Valencia ya les han sacado de las aceras y limitado su velocidad. Pero en el resto de ciudades no hay normativa que les corte el paso.