El agua subía con fuerza y la angustia de los tres barranquistas era cada vez mayor. Durante horas vieron cómo el helicóptero de la Guardia Civil los intentaba localizar sin éxito. Hasta que finalmente, dieron con ellos, aquí en una cueva escondida en Los estrechos del Balced, Huesca. En total 17 horas de angustia. Incluida una noche durísima.
-Redacción-